Quiero ser presidente del PRI, pero si el CEN decide que Marlon y Arianna continúen, soy un militante y estoy para construir con ellos: Reyes Viveros

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Xalapa, Ver.,7 de junio de 2023. “Siempre ha sido un sueño para mí ser presidente de mi partido en Veracruz, y porque no, dentro de la convocatoria que está próxima a emitirse, un contendiente más que tenga la capacidad de levantar la mano con merecimiento, como se ganan los espacios en política. Mi padre me lo dijo muchas veces, en política solo se puede estar trabajando día y noche, y lo he hecho durante los últimos años de mi vida”, afirmó Ramón Alberto Reyes Viveros, secretario de Comunicación Institucional y Estrategia de CDE de PRI en Veracruz.

“Llegué al PRI a los 16 años de edad y vi mi futuro en la administración pública y en la política; creo tener la posibilidad de hablar con jóvenes e invitarlos para crear una nueva generación de políticos en Veracruz que tengan cualidades como las que aprendí: el servicio público, la honestidad y tratar de resolver problemas a las personas que más lo necesitan, así como contribuir con el sector empresarial y a detonar la economía”, dijo al considerar que muchas personas que en algún momento fueron simpatizantes del PRI, en realidad fueron simpatizantes del gobierno.

-¿Quién es Ramón Alberto Reyes Viveros?

-“Es un  político, joven, veracruzano, ingeniero ambiental, que ha dedicado su vida a la administración pública, y a tratar de militar en el partido político que desde joven le inculcaron sus abuelos y sus padres, el PRI, y creo que lo hemos hecho con éxito; y digo tratar de militar porque cuando estás en la función pública debes servir a todos, sin importar colores y siglas, y corresponder a quien te dio la confianza para asumir esa responsabilidad”.

-¿Por qué Ramón Reyes puede ser el líder del PRI?

-“Para hablar en términos legales, el cargo es presidente del Comité Directivo Estatal del partido, y la calidad de líder sería un sueño en realidad, porque para mí, ser líder o dirigente es tener la calidad moral ganada en campo frente a los militantes, para que fueran contigo a la batalla que tú pidieras, y sin duda hay que demostrarlo en la práctica”.

“Le trabajo a Veracruz desde que me levanto y hasta que me acuesto, hay evidencia, ya que durante los últimos cuatro años y para muchos que me conocen los últimos veinte años, diario he informado sobre los sucesos importantes de la vida cotidiana y de la gobernabilidad, y es testimonio del trabajo el monitoreo oficial del OPLE del pasado proceso electoral, una cosa es grillar y otra trabajar”.

“Hay que debatir, pero no entre los aspirantes, sino con la sociedad, mostrarle pruebas del trabajo de cada uno; en este sentido, propongo sortear temas de interés público entre los aspirantes y demostrar cuál ha sido nuestra propuesta o crítica al gobierno en esos rubros. No soy, ni aspiro a ser la voz de los priistas de Veracruz, porque para enfrentar en 365 días al gobierno en las urnas no solo se necesita mi voz, sino la de todos los priistas y quienes no coincidan con las prácticas deshonestas y represoras emprendidas por este gobierno”.

Ramón Reyes consideró que se debe despertar la maquinaria ciudadana que llevó al PRI a la reforma de Jesús Reyes Heroles en 1976, que llevó al PRD a la gran movilización pacífica de 1988, a los panistas a ganar en 1997 y en el 2000 y a los priistas a regresar al poder en 2012, mediante las urnas, sin hacer trampas anticipadas como las hace este andamiaje corrupto de Morena.

Y enfatizó que si se tiene un presidente del partido como algunos que ya ocuparon esa encomienda, “ya sabes cuál será el resultado, no se debe elegir a un presidente por el séquito, sino por el trabajo político y de acuerdos que han logrado”.

-¿Eres la extensión de Marlon Ramírez?

-“Creo que soy parte de la generación, lo que implica un compromiso mayor, no solo con la persona sino con la generación entera”, respondió.

Detalló que en el 2019 recibió la invitación de Marlon, “mi amigo y mi hermano, y de Arianna Angeles, para cumplir una promesa que le hice a él desde el 2010, de que cuando buscara un puesto de elección por voto directo yo lo acompañaría, y así poder llevarlo a ser diputado local, federal o presidente municipal, porque siempre lo vi con mucha madera para ello. Así lo acompañé y me invito a trabajar con él”.

“Creo que Marlon Ramírez Marín, le dio a oportunidad a los más de 21 mil militantes que votaron por él, de ser presidentes con él, y la nueva etapa que inició en 2019 no solo debe continuar sino se debe extender; buscamos un PRI que pudiera hablar de frente con el gobierno y decirle las cosas no contra los funcionarios sino contra la forma de administración que tienen”.

Y añadió: “si yo levanto la mano es porque creo que no debemos de nuevo de tener un PRI con presidentes y dirigentes o titulares de las áreas que tengan componendas con los gobiernos locales, municipales, ni estatales, ni el federal, porque entonces vamos a dejar de ser oposición y la gente lo que nos reclama hoy es que alcemos la voz y digamos qué no se está haciendo en materia de salud, transporte, en el campo, entre otros”.

A todos los aspirantes los respeto y admiro

“No me considero mejor que mis compañeros aspirantes a la presidencia del partido, al contrario, los admiro, los respeto, los quiero y los invito a que en ningún momento si yo tengo la oportunidad de acompañar esos esfuerzos, piensen en dejar el partido, conmigo todos ellos e incluso quienes no están tienen un espacio, porque yo aprendí que la política es sumar para multiplicar, no dividir para restar”.

Se debe entender la nueva dinámica del partido que es de sencillez y humidad, “si se busca ser dirigente del partido por ser dirigente, es como aquella frase: ‘eres el jefe de prensa’, la prensa no tiene jefe y los priistas no tienen dueño, a los representantes de la prensa les pones a su consideración con respeto temas relevantes y de interés público; a los priistas les ofreces un plan de trabajo, su incorporación a la actividad política, una ruta para acceder al poder político y cambiar la realidad de sus barrios, colonias y comunidades”.

“Toda mi vida le he servido a diferentes cuadros políticos que han llegado a ser gobernadores, secretarios, subsecretarios, presidentes del partido, presidentes municipales, diputados, y puedo ser un puente con la sociedad, con los medios de comunicación, con los jóvenes y sectores productivos”, subrayó.

Al cuestionarle sobre una posible imposición del próximo presidente del partido, afirmó que: “en el PRI no existe un gran elector que haga imposiciones, existe un gran proyecto y lo encabeza Alejandro Moreno Cárdenas, y estamos sumados los 518 consejeros nacionales que votamos en el Consejo Político Nacional pasado, le refrendamos nuestra confianza a él y a Carolina Viggiano. Creo que el ejercicio de la política se patentó en el PRI, y vamos a poder sacar un consenso de unidad en cuanto esto se determine, yo no creo en las imposiciones”.

Sin embargo, si el Comité Ejecutivo Nacional del PRI, determina que  esta dirigencia se debe ampliar para seguir el proceso electoral que viene, “yo no tengo  ningún problema con ello como militante o como funcionario del partido, respaldaré a Marlon y a Arianna en la posición en la que se postulen, porque le han dado muestra al priismo de que son personajes frontales, que hablan directo con la gente y que son adversarios políticos dignos para enfrentar al gobierno de López Obrador y de Cuitláhuac García; estoy listo para servirles y consolidar juntos la alianza Va por Veracruz 2024.

Opositores reales y la carta

Respecto a la carta emitida por ex presidentes y militantes del partido que piden a la dirigencia nacional la renovación de la presidencia en Veracruz y hacen críticas a la actual, recordó que hace años después de un proceso electoral  venía inmediatamente la orden de Palacio de Gobierno de la dimisión o ascenso en la presidencia del partido, pero esto ya no es así.

“Creo que desentendieron los periodos que el estatuto marcaba para las renovaciones de la dirigencia, no tanto lo hacen de mala fe, lo hacen porque también quieren un cambio, pero piensan que el cambio debe iniciar fracturando al partido. Y el cambio debe iniciar evidenciando al gobierno, porque ellos tienen la experiencia necesaria, porque ocuparon secretarías en el gobierno, fueron presidentes municipales, y en vez de hablar de lo que el gobierno hace mal o no hace, prefieren hablar del partido; ellos creen que el cambio inicia en el partido, pero en realidad el cambio debería iniciar en ellos”.

Consideró que los supuestos firmantes de esa carta necesitan tener un cargo que los cobije, y un fuero político para ser críticos. “Mi fuero político es mi nombre, yo siempre hago críticas porque soy Ramón Alberto Reyes, yo no necesito un fuero político pero tal vez es porque yo aprendí a hacer política en la oposición”.

Puntualizó además que hayun ejército de ‘ex’ de todo, pero nadie se enorgullece de decir yo aporto sin una nómina, yo le trabajo al PRI con mi presidente de partido en el municipio, al contrario, de ellos hablan mal pero nunca se sienten a invitarles siquiera un café. “Hayun centenar de nombres que andan rondando por ahí muertos de miedo por hacer una declaración contra el gobierno, no sea que los vayan a meter a la cárcel o corran a sus hijos o familiares de sus trabajos”.

“No recuerdo, salvo a Marlon Ramírez Marín, algún otro militante del partido en Veracruz que haya hecho una expresión pública en contra del  gobierno de Cuitláhuac García Jiménez y en contra del gobierno de Andrés Manuel López Obrador; posiblemente en redes sociales lo hayan hecho, pero yo al único que recuerdo hoy haberlo hecho en una conferencia de prensa y con datos reales que han llegado a denuncias, una de las cuales fue la causa real de la dimisión del peor secretario de salud que hemos tenido en el estado de Veracruz, Roberto Ramos Alor, y quien pronto con muchos más, estoy seguro que enfrentará a la justicia, es a Marlon Ramírez, y todo esto se lo valoro porque gracias a él retomamos el rumbo de oposición.

Finalmente, expresó que quienes amagan con irse del partido nunca han estado en el PRI, simplemente fueron simpatizantes del gobierno y de su nómina y confundieron el poder político con el poder económico. 

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