Por Juan Javier Gómez Cazarín
Lo que bien empieza, bien acaba. Y el arranque de este sexenio, los primeros 100 días de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, ha sido inmejorable.
El domingo fui un hombre más en la multitud que acudió al Zócalo con entusiasmo para atestiguar el Informe de la Presidenta.
Con decirles que me encontré hasta a Batman en su Batimóvil, pendiente de cualquier maloso que osara aparecer por ahí.
Su mensaje fue de resultados y esperanza. Fue la confirmación de que es mujer de palabra, congruente con sus compromisos, los que el año pasado fueron de campaña y este año son de Gobierno.
La gente, que se da cuenta de las cosas, califica a la Presidenta como lo que es: una gran gobernante de México.
¿Quién lo dice? La encuestadora Enkoll reveló que el 80 por cuento de mexicanas y mexicanos aprueban la gestión de la Presidenta.
Esto debe doler hasta el alma a quienes quisieran que Claudia Sheinbaum hubiera roto su palabra y jalado en otra dirección, distinta del rumbo marcado por la 4T en los últimos seis años.
Y para que no quede la menor duda de que vamos por buen camino, este lunes se celebró en Veracruz el Foro de Economía Moral y Trabajo con Orientación a la Innovación Pública para el Desarrollo Tecnológico Nacional.
Con la gobernadora Rocío Nahle como anfitriona, el Foro servirá para la elaboración del Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030 y para diseñar políticas para que a la gente le vaya bien en sus empleos y negocios.
Así que, con este inicio, todo pinta para que los próximos seis años, el segundo piso de la Cuarta Transformación, sea una gran etapa para nuestro país.
Por lo pronto, aquí andamos en Veracruz, dándole a la chamba.