Policía de Los Ángeles dispersó manifestaciones con bombas de ruido y gas pimienta 

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Agentes de la Policía han dispersado este lunes con granadas aturdidoras y balas de espuma a una multitud que participaba en una gran concentración cerca del Ayuntamiento de Los Ángeles contra el despliegue de tropas ordenado por la Administración Trump, que ya suma 4.000 miembros de la Guardia Nacional y 700 marines, para contener las movilizaciones que se iniciaron el viernes para denunciar redadas indiscriminadas antinmigrantes.

Manifestantes en Los Ángeles continuaron con las protestas por cuarto día consecutivos, advirtiendo que el despliegue de tropas ordenado por el presidente Donald Trump.

“La gente está enojada y que (las autoridades) respondan con violencia hace que nos enfurecemos cada día más”, respondió Isabella, una joven originaria de Los Ángeles, hija de padres mexicanos y argentinos, que acudió a la convocatoria de hoy.

Una multitud diversa se reunió desde el mediodía de este lunes en la entrada del edificio federal ubicado en el centro de la ciudad para exigir la liberación de los migrantes detenidos en las recientes redadas antiinmigrantes por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE en inglés), y la retirada de la Guardia Nacional y de los 700 infantes de la marina desplegados por orden de Trump.

Tras esto, elementos de seguridad de California, junto a elementos de la Guardia Nacional desplegados por el gobierno federal, contuvieron la movilización, que para la noche de este lunes ya era de pocas personas.

En ese sentido, medios locales señalan que los elementos encapsularon a los manifestantes a fin de movilizarlos hacia calles aledañas de la capital, a fin de resguardar el perímetro de edificios gubernamentales en que han estado protestando.

Se reportó uso de gas lacrimógeno para movilizar a las personas, sin embargo, autoridades locales o federales no se han pronunciado al respecto.

Partidarios de Trump vs manifestantes

Los ánimos se calentaron por la llegada de partidarios del presidente Donald Trump, quienes instigaron confrontaciones con los manifestantes, quienes, pese a la rabia que generaban entre los presentes, intentaron expulsarlos de forma segura de su manifestación.

Los manifestantes nuevamente cargaron contra la Casa Blanca por ordenar un operativo migratorio de unos 30 días, en un pulso con una ciudad en la que los indocumentados hacen parte importante de su tejido social.

Para Alex Aguilar, un joven originario de la ciudad de Los Ángeles, de padre salvadoreño y madre mexicana, ha sido un deber acudir a las protestas en nombre de sus familiares y comunidad latina.

“Mis papás vinieron aquí porque tenían que salir de sus países. No es un crimen trabajar para mantener a tu familia”.

“Que traigan a la marina… eso es para crear más miedo, pero nos da más razones para estar presentes”, aseguró.

Con información de agencias

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