@pablojair

El Partido del Trabajo (PT) ha estado desmoronándose en las últimas horas. Es muy visible que está en medio de una crisis, originada por la malísima decisión de separarse de la alianza con Morena y el Verde.

La arrogancia de pensar que podían solos, les está costando muy caro.

Por ejemplo, en las últimas horas, en el Congreso del Estado perdió su bancada (y los recursos de dinero que eso significaban como grupo legislativo). Dos de sus diputados de plano vieron que el barco ya comenzaba a hacer aguas y se fueron a Morena. Otros se fueron al Verde.

Hoy sólo queda el comisionado nacional y diputado por Coatepec, Ramón Díaz Ávila; y la dipu pluri Elizabeth Morales, a la que tampoco le están saliendo bien las cosas (karma is a b*tch).

Con todo este escenario, pareciera que es inevitable la desaparición del PT, al menos en Veracruz. En encuestas de Xalapa, Veracruz y Coatzacoalcos aparece muy por debajo, poniendo incluso en riesgo su existencia como partido.

Aún así, el PT es –todavía– la esperanza de la desesperación de algunos actores políticos. Al quedarse fuera prácticamente de la jugada, ahora la intención es recurrir a lo que les queda y tengan a su alcance para no quedar fuera del presupuesto.

En Coatepec, por ejemplo, es muy irrisorio el caso de Arely Bonilla, conocida política que ha estado en todos los partidos habidos y por haber.

Ha estado en administraciones del PAN como síndica por el PRD, en esa época donde apoyaba con todo a “Miguel Chiquito”, el hijo del ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. A la caída de los Yunes en el poder, pretendió ser candidata por el PRI, pero no lo logró. En el partido Verde fue candidata a diputada local, pero perdió. Quiso después entrar a Movimiento Ciudadano, pero la batearon…

Y continúa la desesperada búsqueda de la bandera en la cual pueda envolverse: no hace mucho Arely estaba anotada como candidata a la alcaldía del Partido del Trabajo, quizás pensando que como en Coatepec los últimos candidatos ganadores han salido del PT, tendría sin problema candidatura y alcaldía.

Lo que Arely no calculó fue que el PT se puso sus moños, saliéndose de la alianza con Morena y el Verde con la cual los petistas había obtenido los últimos triunfos en diputaciones federal y local.

La ex síndica panista-perredista, al ver que se le caía el castillo de naipes, se anotó de última hora como aspirante de Morena a la alcaldía de Coatepec, mandando por un tubo al PT, pero la jugada no le funcionó: quien ganó la encuesta interna fue Jorge Ignacio “Nacho” Luna.

Con la derrota que le estalló en la cara, se sabe que Arely Bonilla estuvo tratando de presionar a “Nacho” para que le otorgara la sindicatura en la planilla con la que Morena participará en los comicios municipales del 1 de junio. El problema es que la actitud de la ex síndica “perrepanista” no le ayuda en nada: no sólo ha estado brincando de partido en partido en los últimos años (apoyando incluso a enemigos acérrimos de la 4T como los Yunes), sino que quienes la conocen saben que es dada a utilizar el cargo para negocios familiares como pedir obras, contratos, preveedurías, etc.

Aún así, a Arely le ofrecieron la regiduría primera dentro de la planilla de Morena, la cual su gente aceptó en primera instancia, pero media hora después Arely mandó un mensaje para avisar que finalmente no la aceptaba.

Ahora se sabe que le ha costado trabajo meterse en alguna planilla y tuvo que recurrir al PT, el partido que previamente mandó a freír espárragos.

Así, la ex síndica llega al PT en su peor momento, en medio de una tormenta y a punto del naufragio.

Hace apenas unos días, se sabe que Arely fue al Congreso del Estado a hablar con el legislador local Ramón Díaz Ávila, el petista que ganó la diputación por el distrito de Coatepec arropado por la alianza Morena-Verde-PT. Ahí le rogó ser incluida como regidora primera (lo que le ofrecían en Morena) en la planilla del PT, ahora encabezada por Adalid Guerrero Herrera, quien a su vez es esposa de otro ex aspirante de Morena, llamado Ismael Tlaxcalteco.

¿Será que el PT se la dé? Digo, hace apenas unas semanas atrás, Arely los mandó a volar con su candidatura para irse por Morena, donde perdió…

Y, posiblemente, seguirá perdiendo.